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"NOSOTROS" - EVGUENI IVÁNOVICH ZAMIÁTIN

Publicado por Javier Serrano en La República Cultural:
http://www.larepublicacultural.es/article5218.html

"Incluso nuestros antepasados adultos sabían que la fuerza es el origen del derecho y que éste es una función de la fuerza. Imagínense dos platillos de una balanza: en una los gramos, en la otra una tonelada, en una «yo» en la otra «nosotros», el Estado Único. ¿No es evidente que suponer que yo pueda tener derechos sobre el Estado Único, y que un gramo pueda equivaler a una tonelada, es lo mismo? Por lo tanto, la tonelada es el derecho, el gramo es el deber. El único método para pasar de la parte ínfima a la magnitud es olvidar que uno es un gramo y sentirse como una millonésima parte de la tonelada…" (fragmento de Nosotros)

Como deja bien claro el título, la novela de Evgueni Zamiatin habla sobre el "nosotros" (la tonelada) que ha sustituido al "yo" (el gramo convertido en la millonésima parte de la tonelada), y eso a pesar de estar narrada en primera persona, en palabras de D-503, ese constructor-jefe encargado de construir la nave "Integral" que habrá de partir en breve hacia el espacio, llevando hacia otros planetas su mensaje, su fórmula para alcanzar la felicidad.
Nosotros es pionera del género conocido como distopía o antiutopía, novelas que transcurren en una sociedad ficticia y a menudo en un futuro cercano (en este caso el Estado Único), gobernadas por un poder totalitario y absoluto que dirige (de una manera autoritaria y supuestamente benévola) los designios de sus habitantes. En la novela Nosotros el poder está en manos del Benefactor (Bienhechor, en otras traducciones) que se encarga de la felicidad del pueblo, convertido en meros números que sueñan "con alguien que les diga de una vez por todas en qué consiste la felicidad y que luego les encadene a ella", que han perdido la capacidad de amar, de sentir, de compadecerse… en aras de la razón, de una certeza en clave matemática que les aleje de toda incertidumbre. Es una sociedad ideal y de superficie lisas, pulidas; un mundo hecho de cristal y vidrio, donde todo es transparente y está a la vista de todos, incluidos los propios Guardianes. Los confines de este territorio distópico e hiperindustrializado están delimitados por el Muro Verde, que aísla "nuestro perfecto mundo mecánico del irracional y feo mundo de los árboles, pájaros y animales".
La ordenada y feliz (en apariencia) vida de D-503 se quiebra el día que conoce a I-330, mujer fascinante y fatal, Eva disidente que viene a destruir el Paraíso. La tranquila vida de D-503, recogida en esos apuntes (que constituyen la novela) dirigidos a un público desconocido y pretérito, se desmorona por momentos. No es solo que rechace a O-90, la amante ocasional a la que estaba "abonado" y con la que mantenía unos minutos de intimidad de vez en cuando. Ni siquiera el riesgo evidente de haber escrito unas páginas comprometedoras, o que su conducta aberrante le pueda conducir a la muerte en la Máquina del Benefactor. Es algo más, el conocimiento de ese grupo insurgente y secreto al que pertenece I-330 le hace sentir mal, ¿a qué espera para denunciarlo al Benefactor? Se siente culpable, enfermo, tal vez su problema, grave, es el que le diagnostica un médico: que tiene alma. Ello implicaría ser distinto, quedar fuera del "nosotros", sumirlo en la incertidumbre de lo irracional, simbolizado por la raíz cuadrada de -1. Quizás la solución al problema sea esa Gran Operación a la que todos quieren entregarse y que tiene como fin acabar de una vez por todas con la fantasía. Nosotros es precisamente eso: el dilema entre el yo y el amor a una mujer, y el nosotros; una trama desarrollada en forma de anotaciones con una prosa de frecuentes frases inacabadas que funde la poesía con las matemáticas, con la perfección de la geometría, pero que no renuncia a la ironía y al humor (especialmente en la descripción física de algunos personajes).
Nosotros fue escrita en ruso en 1920 (si bien en la Unión Soviética no se pudo leer en su idioma original hasta 1988) y publicada primeramente en inglés en 1924. A pesar de ser simpatizante del partido bolchevique y de haber padecido prisión por ello, Zamiatin (y la crítica a todo poder totalitario, incluido el estalinista, que supone Nosotros) no tardó en padecer el precio de todo autor independiente que se precie: la censura. La imposibilidad de desarrollar su carrera como escritor llegó hasta tal punto que empujó a Zamiatin a pedir públicamente, en carta dirigida al mismísimo Stalin, que se le permitiese salir de la URSS, deseo que finalmente pudo ver cumplido, gracias a la mediación de Gorki, marchando con su esposa a Praga y luego a París, donde su talento se sumirá en el olvido.
Los antecedentes de Nosotros pueden rastrearse en autores como H.G. Wells o Jack London. En cuanto a las novelas inspiradas de una manera más o menos evidente en la obra de Zamiatin, podemos hablar de Un Mundo Feliz, de Aldoux Huxley, 1984 y Rebelión en la granja de George Orwell, Fahrenheit 451, de Ray Bradbury, La Naranja Mecánica, de Anthony Burgess, ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, de Philip K. Dick (que a su vez habría de dar pie a la grandiosa película Blade Runner)…, obras mucho más conocidas, por desgracia, que la del propio autor ruso.
Respecto a su huella cinematográfica, aparte de la ya mencionada obra de Ridley Scott y de algunas de las adaptaciones al cine de las novelas citadas, Nosotros también influyó en películas como Metrópolis de Fritz Lang, El planeta de los simios, de Franklin Schaffner, o la más reciente Matrix, de los hermanos Wachowski, entre otras.
¿Tiene vigencia el término distopía en el s. XXI? Ya no existe el régimen estalinista ni tampoco el nazi, y el número de dictaduras se ha reducido, ¿entonces? ¿Se pueden considerar distopías ciertas formas de gobierno denominadas democracias, pero que en la práctica se quedan en pseudodemocracias? La idea de capitalismo como única forma válida de pensamiento, como único camino posible hacia la felicidad, ¿acaso no es una variante del Benefactor que describe Zamiatin? ¿En qué se diferencian las elecciones de los países libres de ese Día de la Unanimidad, anual, en que los números de Nosotros votan a un solo candidato? La globalización actual ¿es diferente de la nave Integral en su afán proselitista por difundir su mensaje de felicidad?

"Y nosotros, mis queridos lectores de otro planeta, iremos a visitarles para que vuestra vida sea tan ideal, racional y precisa como la nuestra…".